Las relaciones entre dominicanos y venezolanos, largas en el tiempo, han dejado y dejarán frutos importantes para las generaciones presente y del porvenir.
Un día de 1818 o 1819, José Ildefonso Falcón emprendería un viaje, posiblemente en una goleta, hacia las costas de Paraguaná. Sentó raíces en Jadacaquiva, una pequeña aldea, ya adentrada en el centro peninsular y allí conoció a Josefa Zavarce, una dama de la zona con quien casó y de cuya unión nace el futuro general Juan Crisóstomo Falcón y Zavarce (1820-1870), líder de la triunfante Revolución Federal venezolana, hecho ocurrido entre 1859 y 1864, cuyos herederos políticos gobernaron hasta 1899; realizando cambios profundos tales como la instauración de la educación primaria gratuita y obligatoria; la creación de las academias de ciencias, historia, entre otras; el primer acueducto de Caracas, ferrocarriles, telégrafos y muchas más realizaciones. Como todo en la vida, también tuvieron sus falencias.